Rescato del purgatorio de las novedades muertas en la vorágine navideña este tomo de Batman que merece más atención de las que estoy seguro se le está dando.
Una historia que como bien dice el título sucede en el asilo de Arkham, sumamente conocido en el universo de Batman hasta el punto de que casi funciona como un personaje más de la serie.
A este asilo llega Warren White, un alto ejecutivo que en su afán de ganar todavía más dinero estafa a medio Gotham dejando en la ruina a familias de padres y niños, jubilados y demás habitantes de la ciudad. En su juicio, gracias a un tecnicismo, elude la prisión para acaba en el asilo Arkham.
Este personaje, Warren White, le sirve al guionista Dan Slott como excusa para hacer un tour del terror por los pabellones del sanatorio con la gran fortuna de dejar la presencia de habituales como el Joker, Dos caras y otros en simples cameos y centrarse en la historia de personajes de nuevo cuño como Jane Nadie, Larva, Perro de Vertedero y Humpty Dumpty. Sin duda, gran acierto del guionista y principal razón de que os esté hablando de este tebeo ahora mismo.
Con el mismo espíritu que series como Gotham Central donde Batman y sus colegas habituales casi ni aparecían, las vidas de estos villanos de nueva generación se descubren ante nosotros, proporcionando una divertida y refrescante lectura, algo poco habitual en el universo del murciélago.
Destacar también el dibujo de Ryan Sook, que sin ser un privilegiado sabe dar a sus dibujos el toque adecuado para la historia, con un aire a Tim Sale que le sienta de maravilla.
Un tebeo que gustará a lectores en busca de algo diferente dentro del universo Batman y que disfrutaron con obras como Gotham Central o las tramas de la serie de animación de Batman.
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