Doy por hecho que libros y relatos con base en el confinamiento no nos van a faltar, pero dudo que haya muchos tan certeros y necesarios como este desahogo en forma de cómic realizado por Max.
En determinado momento, Max perdió la paciencia que se nos estaba demandando ante una situación extraordinaria y el autor dio salida a toda la furia contenida a través de las páginas de este "panfleto".
Lo del dominio de la narrativa y del dibujo en sí mismo lo vamos a dar por supuesto. Inútil intentar colocar más epítetos a un autor como Max a estas alturas de la película.
Tan necesario como catártico.
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