Nuevo producto de la factoría Millar. En esta ocasión el controvertido guionista y businessman se nos pone un tanto trascendental y nos propone una historia sobre el fin de nuestra existencia personal y lo que hay más allá de la muerte. Pero tranquilos, porque poco le dura esta trascendencia al guionista escocés.
En su particular revisión del cielo y el infierno post mortem, Millar se saca de la manga un fantástico mundo lleno de guerreros, dragones, naves especiales y todo aquello que tiene a bien meter, donde cada recién llegado adaptará el papel de héroe o villano según sus buena o malas acciones en su anterior vida.
Una excusa como otra cualquiera que le sirve a Millar para dar su dosis de trepidante acción, explosiones y espectaculares escena de batalla. Si este cocktail está servido en la parte gráfica por el talento de Greg Capullo, tenemos la combinación perfecta.
Recomendable para seguidores habituales del guionista y para aquel lector que busque una vertiginosa lectura.
No diga Millar, diga palomitas.
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