lunes, enero 31, 2011

The Adventurers



Otro juego ideal para toda la familia. Sencillo, sencillo, sencillo, pero adictivo, adictivo, adictivo. Partidas de 20 minutos en las que lo jugadores, cual Indiana Jones, tendrán que conseguir el máximo número de tesoros posibles.


Unas reglas supersencillas, que os podéis descargar de la web de Edge, permitirán estar jugando en menos de 5 minutos y casi es asegurado que una partida llevará a otra. Ideal para echar una partidilla tras una cena, aunque os advierto que hay peligro de que las visitas se queden enganchadas hasta altas horas de la madrugada.

viernes, enero 28, 2011

El rincon de Zeke: El fin de una era



Primero avisar de que este es un de esos post tipo; ¿por qué me cuenta este tío su &%$ vida?.
De paso aviso a los que les guste el drama que la historia acaba en tragedia.

En la parte de atrás de mi casa está lo que llamamos "la casa vieja". Es un fallado y debajo dos habitaciones y un baño. En una de esas habitaciones guardo los tebeos y la otra la utilizamos de trastero. Hace poco tuvimos que hacer reformas. En el fallado las vigas de madera estaban medio podridas y tenía pinta de ir a derrumbarse en cualquier momento.

Cuando empezaron las obra me dijeron que tenían que hacer un agujero en el techo de la habitación de los tebeos para poner una viga y poder sostener la estructura. Cambié un montón de tebeos a la otra habitación y tape los demás. Hacía un tiempo perfecto y los meteorólogos decían que se iba a mantener pero fue sacar el tejado y las paredes del fallado y caer el diluvio universal.
En la habitación de los tebeos solo había una pequeña gotera puse un cubo y lo tape todo con unos plásticos especiales por si acaso.
El problema en la otra habitación era diferente había muchas goteras y tuve que sacar de allí los tebeos.

Cuando acabaron con las paredes pudieron poner una lona y el problema parecía solucionado aunque recuerdo una noche de vientos huracanados que arrastro la lona y nos dejo a mi hermano Toñi y a mi defendiendo el fuerte con sendas fregonas. Finalizaron las obras. Mi hermano Miguel me hizo un favor y volvió a meter los tebeos en la habitación pero no tiene ni idea de cómics y lo único que hizo es mezclarlos de mala manera aunque fuera con buena intención. ¡Menudo lío!

Como hubo tanta humedad pensé en sacar todo y volver a pintar la habitación pero Bea, la mujer de mi hermano, dijo que seria buena idea cambiarlos a la habitación del trastero pues había más espacio. Entre mi hermano Toñi y yo vaciamos la habitación. Increíble la de mierda que se va juntando. Después tuve que "rozar" toda la habitación. Me libré de pintarla porque lo hizo el novio de mi hermana. Finalmente entre mis dos hermanos y yo desmontamos las estanterías y llevamos los tebeos a la nueva habitación.

Ya solo me quedaba llevar algunos tebeos que tengo en un armario viejo y los de otra estantería que ya está vieja. Quería jubilarla y comprar un nueva. LLevar los tebeos de un lado para otro, desmontar muebles viejos y todo el chollo resultante... podéis imaginar que acabé más que harto.

Y ya está. Se acabó la odisea... Está bien. Os habéis tragado todo este rollo y aún no habéis visto nada de sangre. ¿Queréis la parte trágica? Ahí va:

Cuando estaba llevando los tebeos de grapa me di cuenta de que había muchos que tenían las paginas interiores pegadas. Algunos en las esquinas pero otros por el centro. Como podréis imaginar, eso destroza totalmente el tebeo.

Me fui para el chollo cabreado con el mundo y completamente frustado. Por momentos pensé en mandar todo a tomar por el culo y no volver a comprar un tebeo en toda mi vida, pero si algo tiene Citroën es que tienes tiempo para pensar. Me di cuenta de que sería imposible. Soy un yonqui al que le gusta demasiado "esta mierda".

Pero tomé una decisión. Dejo de comprar tebeos de grapa. Se acabó.
Como decían en Friends "Es el fin de una Era".




ZEKE

jueves, enero 27, 2011

Dynamic Anatomy: Revised and expanded



La biblia del dibujante de superhéroes. El libro de cabecera con el que cualquier dibujante académico que se precie debería acostarse, levantarse, ducharse y sí, también ir al retrete. Una aproximación al cuerpo humano realizada por Hogarth, uno de los dibujantes clásicos de Tarzan y donde la importancia viene dada porque el punto de vista se aleja del estrictamente médico y se acerca a la imagen artística del cuerpo humano, mucho más útil y necesaria para cualquier dibujante.

Un libro que lleva siendo una referencia para todo tipo de artistas, desde las escuelas de arte a los dibujantes más autodidactas. Por supuesto, como toda referencia, este libro tiene sus defensores y sus detractores. No es el primer dibujante que me dice que el modo en que Hogarth exagera hasta el paroxismo los limites de la musculatura humana roza la desproporción. Por otro lado, también hay dibujantes que defenderán el método hasta el fin de sus días y lo pondrán como la piedra filosofal del buen dibujante, capaz de llevar a un simple tiralíneas a las máximas cotas de calidad artística.



En cualquier caso, el libro no es mágico. Así que olvidaros de milagros. Sin trabajo y constancia no se llega a nada. Eso sí, sin duda puede ser una gran ayuda en el camino.

miércoles, enero 26, 2011

Los vengadores: Noches de Wundagore


Si ayer os hablaba del homenaje que Blutch realizaba a sus tebeos y héroes de infancia, hoy recupero uno de esos tebeos que marcó la mía. Era esa época en que más que leer los tebeos que querías, leías los tebeos que llegaban a tus manos. Seguir una colección en un quiosco era casi una proeza puesto que nunca tenías asegurado que el próximo número fuera a llegar o que si lo hacía, no se lo llevara alguien antes. Por esta razón, conseguir disfrutar de una saga completa era doble motivo de alegría.

Los últimos años de los 70 fueron un momento especialmente prolífico para Los Vengadores. De esa época salieron grandes historias como la seminal La saga de Korvac, la "menos conocida" La trilogía de Nefaría o esta Noches de Wundagore que nos ocupa. Aunque el criterio general se decanta por la de Korvac como la gran saga vengadora de siempre, como os dije, yo guardo un gran recuerdo de Wundagore.

Después de pulular por el universo Marvel salidos de las páginas de los X-Men, por fin, en estas páginas se ponía fin al misterio sobre el origen de dos personajes claves como son Mercurio y La Bruja Escarlata, Pietro y Wanda.
Aún a día de hoy la aventura guarda la misma fuerza y frescura de antaño. Supongo que en esto tendrá mucho que ver el gran trabajo realizado por David Michelinie al guión (que desembocaba en Los Vengadores tras remodelar completamente a otro icono Marvel como Ironman) y el despliegue gráfico de un John Byrne en el punto más álgido de su carrera, tanto a nivel de dibujo como a nivel narrativo.

Imagino que para aquellos que no tienen el plus sentimental de haber leído este tebeo en su momento, podría resultar un poco más complicado contagiarse de mi entusiasmo. Solo os puedo decir que os dejéis llevar y que descubráis por vosotros mismos porque los abueletes hablamos con tanta pasión de los superhéroes de nuestra época. Os aseguro que no es solo una cuestión de sensiblería barata, pero qué culpa tenemos si en ese periodo los tebeos de superhéroes eran realmente buenos.

martes, enero 25, 2011

El pequeño Christian



Muy acertadamente, Norma Editorial rescata del olvido una de las obras fundamentales (para mi, sin duda, su gran obra) de Blutch, recopilando en un solo libro los dos tomos que originalmente en Francia fueron publicados con 10 años de diferencia.

La primera entrega de las aventuras de Christian data de 1988, momento de gran producción editorial y creativa en la editorial independiente L'Association, muy alejada de la actual realidad de la misma, con suspensión de pagos y despidos generalizados. Pero dejemos de divagar y sigamos con la historia que nos ocupa.
Como decía, en ese momento, Blutch nos propuso su homenaje al pequeño Nicolás de Sempé, a modo de relato autobiográfico del fin de su infancia y de la entrada en el mundo adulto. Una historia bastantevista pero que en esta ocasión resulta realmente original debido al punto de vista que Blutch da a la historia, repleta de homenajes y guiños a una infancia rebosante de tebeos y aventuras sacadas de los héroes de la tele y el cine.


Con gran maestría narrativa, utilizando genialmente los silencios y con un dibujo que ya mostraba toda la fuerza del autor, El pequeño Crhistian puso a Blutch en el podio de los autores independientes del momento. Poco después de su publicación y siguiendo la tendencia natural de la época, Blutch dio el gran salto y comenzó a publicar con las grandes editoriales.
Diez años más tarde, en el 2008, recuperó a su personaje con un segundo tomo de El pequeño Christian, también publicado con sus amigos de L'Association.

En este segundo tomo, pese a seguir con la idea inicial de la serie y el personaje, se nota un gran cambio propiciado por la explosión gráfica de Blutch y que se refuerza aún más al tomar la serie un bitono, donde el blanco y negro del primer tomo se ve acompañado aquí por unos tonos naranjas. El pequeño Christian sigue su evolución lógica y natural y entra en ese complicado mundo que es el amor de infancia. Su nombre; Catie Borie. En boca del propio Christian; "Una mezcla explosiva de Claudia Cardinale, Barbara Carrera, de Ali Mc Graw, Raquel Welch, Jacqueline Bisset y... de Tarita, la hija del rey de Tahití."

Una obra de una gran sensibilidad, no exenta de humor y repleta de guiños a esa etapa de nuestra vida donde todo se reducía a ver quién hacia de indio y quién de vaquero. Una pena que el perfecto equilibrio entre historia y estilo no se repitiera en otros proyectos del autor, porque por lo menos para mi, éste es el gran Blutch.

lunes, enero 24, 2011

La cosa del pantano de Moore


La edición ¿definitiva? de una obra maestra maltratada editorialmente en nuestro país en sus anteriores ediciones. La propia editorial Planeta, culpable de la última afrenta conocida, intenta remendar el entuerto y, visto lo visto, parece conseguirlo.

Un personaje que pese a un esperanzador comienzo de la mano de Wein y Wrightson, tuvo que esperar a que las malas ventas y una amenazante posibilidad de cancelación posibilitaran que un primerizo Alan Moore tomara las riendas de la historia para sentar un nuevo comienzo para el personaje y de paso sentar las bases del cómic americano para adultos, del futuro sello Vertigo de DC y de series como Sandman y demás epígonos.

Alan Moore, con plena libertad creativa, trasciende al hasta ese momento limitado universo del personaje y nos propone un tipo de historia que va más allá del mero superhéroe, creando unos guiones que beben directamente de temas tan universales y humanos como el amor, el ecologismo, la amistad, la violencia, sabiéndolos mezclar con la justa dosis de terror, acción y drama.

Aunque toda la serie guarda una continuidad, dentro de la misma podemos encontrar varios arcos arguméntales o sagas que funcionan por si mismo como pequeñas historias completas. Dentro de ellas, la saga American Gothic brilla con luz propia, teniendo el extra de ser la saga que vio nacer a un personaje clave del universo DC como es John Costantine.

En la parte más técnica, Alan Moore mantiene un tono experimental durante todo la obra, aunque siempre sabiendo que su público final, por lo menos de comienzo, iba a ser el lector de superhéroes. Ayudado al dibujo por Bissette y Totleben, que se ponen al servicio de la historia, este equipo creativo consigue rescatar a La cosa del pantano de un más que posible olvido general para elevarlo al altar de las grandes obras escritas y dibujadas en el mundillo del cómic.


Planeta tiene pensando publicar toda la etapa de Alan Moore en tres bonitos tomos integrales, de los cuales ya tenemos el primero disponible. A mayores, también planea publicar la posterior etapa de Rick Veitch, que no mantiene la calidad de la etapa de Moore pero si que puede interesar a los más completistas.

Una obra maestra del cómic, que resiste con fuerza el paso del tiempo y que hoy en día se lee con la misma frescura que en el momento que fue creada.

viernes, enero 21, 2011

El rincon de Zeke: Scalped



La próxima vez que entréis por la tienda no tenéis que decir ni buenos días. Lo primero que tiene que salir por vuestra boca es; Scalped. Luego, cuando tengáis el primer tomo en vuestras manos, ya podéis volver a ser educados.

Me costó decidirme a comprar este tebeo. Había leído alguna buena reseña de él, entre ellas la de nuestro librero, y que el dibujante pasara por Aviles este año (aunque al final se fue antes de que nosotros llegáramos) podría haber ayudado. Aun así, el que me convenció fue El ingeniero y su enfervorizada defensa; "Es la mejor serie que están publicando actualmente".

El tema es que tiene razón. No creo que haya otra serie que me tenga tan atrapado como esta. Cada tomo acaba con un continuara que hace que tengas que abalanzarte a comprar el siguiente sin pensarlo. Esta es una serie de personajes. Cada uno perfectamente construido. Hasta el más secundario tiene su razón de ser.

Por poner un ejemplo. A lo mejor aparece uno que piensas que es un hijo de p&%$ y cuando el guionista te cuenta la historia que tiene detrás pasa a ser uno de tus favoritos. Está claro que esta es una serie que se vende por su guionista, Jason Aaron, pero el dibujante R.M. Guéra ha alcanzado tal grado de simbiosis con el guionista que es difícil imaginar a otro como dibujante principal de este comic.

Normalmente los prólogos al tomo están escritos por reconocidos guionistas y cada uno de ellos está enamorado de este tebeo. Esto debería daros una pista de lo buena que es Scalped.

Poco más que añadir. Como dice El ingeniero "Cosa buena". Dejarlo pasar seria un pecado.



ZEKE

jueves, enero 20, 2011

Charlando con: Los tres caidos (AKA Las tres estrellas)

Al oeste de los reinos civilizados existen unas tierras cuyo nombre este cronista ha olvidado. Tal vez en algún momento fueron un reino y el mismo fue floreciente, pero de eso hace tanto tiempo que ni sus propios habitantes lo recordaban.

Durante muchos años el reino estuvo en guerra y su paisaje arrasado, hasta que apareció el autoproclamado rey Ned. El rey pacificó el territorio, llegando a un acuerdo con los señores feudales, pero no sin coste. Y así, como suele pasar en estos casos, fueron los vasallos los que tuvieron que pagar el mismo, recibiendo a cambio las migajas de la mesa de su señor.

Un día, al reino llegaron tres caballeros.

El primero de ellos era un guerrero. A pesar de no llevar demasiados años a sus espaldas, sus hazañas habían sido tales y de tal arrojo que su nombre ya sonaba en las trovas de los juglares. Suya era la fuerza y suya también la arrogancia de la juventud.

El segundo era un mago. Su bagaje como caballero era aun mas escaso, pero en las cortes occidentales su nombre era sinónimo de talento. Su dominio de la magia iba parejo a sus conocimientos arcanos... y a sus gustos refinados. Suyo era el talento, mas suya era también la semilla de la indolencia.

El tercero era un héroe, curtido por los años y el camino. A lo largo de su historia, por aquellas tierras habían pasado muchos hombres: guerreros, mercaderes, mercenarios y magos de distintos talentos. Pero tan solo tres o cuatro héroes. Este era uno de ellos.

Los tres se presentaron en la corte del rey Ned y se pusieron a su disposición.

El Rey Ned los convenció que un reino se hace grande con el esfuerzo de sus súbditos. La gente, esperanzada al principio, se fue desengañado al ver cual era el papel real que el rey les había encargado: cobradores de sus impuestos.


El tiempo pasó y los caballeros vagaron y vagaron.

El guerrero se gustó a si mismo y la edad y la arrogancia arruinaron su porte. Aún tenía su fuerte brazo, pero gustaba exhibirlo más en fanfarronadas que en verdaderas cuitas. Y así, su estrella se empaño.

El mago siempre fue dado a gustos caros y refinados y a mediada que su erario se enriquecía con la dádivas del Rey Ned, contrató a otros para que vagaran en su nombre llevando a cabo sus tareas, mientras el supervisaba las operaciones desde su cada vez más alta torre. Y así, su estrella se corrompió.

El héroe fue el peor parado de los tres. A medida que su fama iba creciendo, Ned llego a considerarle como una amenaza. Y no dudo, mientras le enviaba a misiones cada vez más descabelladas, en contratar asesinos para eliminarle. El héroe vagó errante de un lado a otro, luchando contra fantasmas, sometido a la tiranía del rey. Finalmente, agotó sus fuerzas y cayó. Su estrella palideció pero no se apagó, ya que nunca fue olvidado.


Llego el invierno y luego la primavera y de nuevo el invierno. Otros señores, descontentos con el Rey Ned, se confabularon para derrotarlo. El rey se acordó entonces de los tres caballeros pero ya ninguno de ellos era un caballero. Cuando llegó nuevamente la primavera, las llanuras volvían a estar en llamas y la guerra, extendida por el reino que nunca fue un reino. El resultado fue el de siempre: la hambruna.


No pasa día sin que lleguen noticias de nuevas escaramuzas o se observe en el cielo el humo procedente de algún incendio; ni noche en la que no se escuche el llanto, los sonidos de las armas o, en el mejor de los casos, el silencio.

La gente aún llora la muerte del héroe.

Y aquí permanecemos.

M

miércoles, enero 19, 2011

Él, ¿quién si no?



¿Pero qué es esto?, os preguntaréis. ¿Una nueva serie del padre de Solo? ¿Pero no le hubiera sido mejor dedicar el tiempo a sacar otro álbum de Solo?

Pues si y no. Todo esto lo piensa y comparte con nosotros el padre del invento, es decir, Oscar Martín. Un dibujante con mayúsculas, que va sacando obra tras obra ante la pasividad del aficionado medio y que seguramente no será reconocido masivamente hasta que algún crítico francés lo suba a los altares. Luego vendremos todos diciendo lo bueno que es y cómo su serie vende miles de ejemplares en Francia. En fin.

Pero bueno, que hoy hablamos de Él, un personaje que sale del blog del autor, como puro experimento creativo y a modo de catarsis personal. Un invento que nace como anécdota metalingüística y que poco a poco se conforma como una historia autoparódica. Página a página, Oscar Martín aprovecha las conversaciones con su irreverente criatura para reírse de sí mismo como autor, de las convenciones del medio en general y del género negro en particular.


Dejando a un lado que simplemente por disfrutar de cada viñeta, de cada dibujo, de cada página, ya merecería la pena la compra de este tebeo, a mayores, hay que reconocer que es complicado no pasarselo bien con toda la parte donde se desvelan aspectos creativos, manías de dibujante y truquillos de andar por casa.

lunes, enero 17, 2011

Denys Wortman's New York


La historia que nos imaginaba Seth en su La vida es buena si no te rindes se hace realidad. Denys Wortmans, uno de los ilustradores más respetados y carismáticos de su tiempo, es rescatado ahora del olvido gracias al trabajo de investigación realizado por otro autor, James Sturm, que se interesó por la obra de Wortmans tras ver muestras de su trabajo más conocido, Mopey Dick and the Dukes.



De este trabajo de investigación, y gracias a la inestimable ayuda del hijo del autor, nos llega ahora este Nueva York de Denys Wortman, una recopilación de pequeños instantes en forma de ilustraciones que muestran el día a día del Nueva York de los años 30-40 y que sin quererlo se convierte en un pequeño homenaje a la ciudad.



Aún a día de hoy no queda muy claro cual fue el verdadero origen de estas ilustraciones y cuanto de encargo profesional y cuanto de pasión personal puso Wortmans en su realización. Fuera como fuese, el documento está ahora disponible para presentes y futuras generaciones y no sería excesivo ver en ellas un apunte de lo que luego Will Eisner elevaría a obra maestra en Contrato con Dios y la trilogía de Nueva York.



viernes, enero 14, 2011

El rincon de Zeke: Malditos bastardos



Entre las próximas novedades de Norma va a salir un tomo de Hellboy con material ya publicado salvo por una historia inédita. Serenidad. Como ya dije, estas jugadas son habituales con Hellboy y Norma.

Hace nada, en un mismo mes, coincidieron tres "regalos" parecidos.

Panini sacó un tomo de Camino a la perdición del que la mitad del tomo ya había sido publicado por Dolmen. Norma sacó el segundo tomo de Planetary e igual que en el caso anterior la mitad del tebeo ya había sido publicado. Norma también sacó un tomo de Astrocity con un número especial inédito aunque un "compañero del metal" no dudó en echar sal a la herida y decirme que en los anteriores tomos ya habían publicado material inédito entre lo ya publicado.

Serenidad. Son demasiados años y ya no hay nada que me sorprenda.

Uno de los casos más sangrantes fue Bone. La colección estaba a punto de terminar cuando Dude editorial quebró y nos quedamos colgados. Astiberri consiguió los derechos y hasta ahora ya ha sacado tres ediciones de la colección pero ninguna que no obligue a pagar por unos tebeos que ya tenemos.

Serenidad. Es mejor no pensar en ello.

Planeta va a editar Starman de James Robinson. El primer tomo contendrá del numero 0 al 16 Usa. Bueno, tengo dos tomos de Zinco y dos de Dolmen editorial que contienen del 0 al 15 Usa. Je, je (risa nerviosa).

¿Serenidad? SERÁN HIJOS DE %&$
Por un $%& número. ¿En serio?. POR UN $%& NÚMERO!!!
¿No podían haber empezado a publicar material inédito en el segundo tomo?
Menudas ratas, parecen judíos en el sentido mas peyorativo del termino.
Umm eso me ha quedado un poco antisemita. Pido disculpas no como Rosa Diez que es una &%$&.





ZEKE

jueves, enero 13, 2011

Fjorden



Después de habernos ganado a todos como lectores y seguidores con su tebeo Julia y la voz de la ballena y de haber rematado la faena conquistándonos en persona con su bonhomía, el inquieto amigo Álvaro Ortiz nos manda un adelanto de sus obras por venir en forma de cómic autoeditado bajo el críptico nombre de Fjorden.

Un nombre que podría ser el título de una canción de Sigur Ros y que comparte con este grupo el lirismo y la belleza de su propuesta. Como diría el propio Álvaro, una cosa bien bonica.




Supongo que este tebeo, que salió del peregrinaje noruego del artista, nace un poco de la necesidad de darnos en los morros a todos aquellos que le decíamos que íbamos a tardar mucho en ver una nueva obra suya, casi tanto como el tiempo que dedicó a la elaboración de su Julia.
Afortunadamente para Álvaro, en este caso el tiempo de creación se redujo sensiblemente, aunque no por ello la calidad. Y también fortuna para nosotros, que podemos disfrutar de otra joya comiquera.

No es éste un caso en el que haya que recurrir a la militancia para defender la valía del tebeo, puesto que su contenido merece cada uno de los 6 euros que tendremos que pagar por llevárnoslo a casa, pero tampoco está de más destacar el esfuerzo, triple, del autor, puesto que a mayores de hacer el tebeo, también se lo ha autopublicado y por si no llegara, también los distribuye de manera artesanal.

Vuelve el artista renacentista y vuelve la magia de Álvaro Ortiz.

miércoles, enero 12, 2011

Todo 36-39 Malos tiempos


Felicidades a los premiados!!! Es lo primero que se me viene a la mente al ver esta nueva edición integral de la sensacional serie de Carlos Giménez publicada anteriormente en 4 volúmenes por Glenat.

Y digo esto, porque para todos aquellos que no se lo hayan comprado en su día, pagando 15 euros por cada tomo para hacer un total de 60 euros, ahora podrán llevarse esta nueva edición integral por el bonito precio de 14.95 euros. Vamos, una suerte de lotería comiquera.

No sé. Sinceramente, como librero y como comprador y lector final, pienso que con este tipo de maniobras comerciales se están cargando el tinglado. Los lectores de cómic somos muy fieles y militantes, pero tontos, tontos, pues hombre, creo que no.

Tanto los saldos como las ediciones integrales tienen su razón de ser, siempre y cuando se hagan respetando los tiempos y las formas. ¿Pero cómo se le puede explicar a un comprador que ha pagado religiosamente 60 euros por una obra, que 6 meses después tenga acceso a ese mismo material por 1/4 de su valor inicial?

En fin. Vamos a jugar el comodín de la salvaje ley del mercado. Con eso se arregla todo.

martes, enero 11, 2011

Rabo con almejas


Cuando un dibujante confiesa abiertamente que realiza sus dibujos "con el rabo" y nos invita a echarle un vistazo a sus trabajos para verificarlo, ya podemos tener claro que sus obras se tienen que revisar desde una óptica diferente.

Álvarez Rabo es el adalid de lo políticamente incorrecto. Un autor al que no le importa alimentar la leyenda urbana sobre su persona (dice que se gana la vida como empleado de El Corte Inglés, sección deportes, y que siempre oculta su rostro puesto que su puesto de trabajo correría peligro), y que en las páginas de su tebeos se ríe de todo y de todos, incluida su persona.

De todas formas, aunque a primera vista sus chistes pudieran parecer un simple provocación de "caca, culo, pedo, pis", a poco que nos dejemos llevar por sus historias de sexo bizarro, falsa religión y política de cartón piedra, podremos comprobar que existe vida inteligente en el planeta Rabo.

En este Rabo con almejas, obras incompletas volumen 1, se nos ofrece una inmejorable oportunidad de introducirnos en el universo Rabo.

Con un rápido vistazo a las tres primeras historias, con temáticas como la corona, ETA y sexo, nos va a quedar claro lo que tenemos entre las manos. Si al leerlas una sonrisa se dibuja en nuestra cara, este es nuestro tebeo. Si por el contrario, nos giramos buscando al librero con la intención de reprenderle por vender este tipo de mierda, está claro que no es un tebeo para nosotros. En cualquiera de los dos casos, Álvarez Rabo estará más que satisfecho por la reacción conseguida.

lunes, enero 10, 2011

Tex de Víctor de la Fuente

La aportación que el gran Víctor de la Fuente hizo al personaje Tex de la editorial Bonelli, con guiones de Claudio Nizzi (el guionista más carismático de la serie, si quitamos a los originarios Bonelli) es recuperada por Aleta en una bonita edición en formato tomo.

El personaje de Tex, uno de los personajes con más carrera en el mundo del cómic ya que se lleva publicando desde 1948, recibió numerosas aportaciones de autores patrios como son el mismo Víctor de la Fuente, Jordi Bernet, Segura, Font, Sommer, etc...
Eran los texones, colaboraciones esporádicas donde el personaje se ponía en manos de autores no habituales para que dieran su propia visión. Bueno, realmente esta visión estaba estrictamente dirigida desde la editorial, con el señor Bonelli a la cabeza, marcando duramente las pautas a seguir tanto en dibujo como en comportamientos del personaje, pero que en todo caso, siempre permitía una cierta licencia personal a cada equipo creativo.

En este tomo que nos trae ahora Aleta, Tex se ve envuelto en una aventura digna del western más clásico, donde tiene que evitar una guerra abierta frente a los Apaches. Pura esencia de western.

Si al más que correcto, profesional y entretenido guión de Nizzi le sumamos la aportación gráfica del maestro Víctor de la Fuente (puede que no sea su mejor obra, pero los peores trabajos de Víctor de la Fuente superan con creces la media de calidad), el resultado es un cómic que puede mirar directamente a los ojos a clásicos del género como pueden ser las mejores sagas de Blueberry, Comanche o Durango.

viernes, enero 07, 2011

El rincón de Zeke: Hellboy





Hace como un millón de años, cuando era chaval, mis amigos me preguntaban por qué me compraba tebeos como Mundos de Kripton o Fafhrd y el Ratonero Gris, pues no les gustaba nada el dibujante. Yo siempre me defendía con un corto pero efectivo "a mi me gusta".

Fueron pasando los años y un día me encontré con un tebeo que no pude evitar comprar; Hellboy. A los guiones John Byrne a los dibujos Mike Mignola y aún por encima te llevabas un complemento de Monkey Man y O´brien de Arthur Adams. Aquello era una golosina.

Llevé el tebeo al instituto y Marcos, un amigo que tenía por aquel entonces, me preguntó por él. Yo enseguida y casi a la defensiva le dije "a mi me gustan los dibujos de Mike Mignola" y él me contestó con una sorprendente respuesta; ¿Y a quién no?

Al parecer, con el paso de los años, Mignola se había convertido en todo un Fan Favourite y yo sin darme cuenta. Seguí comprandome Hellboy, sintiéndome atracado cada vez que me compraba un tomo y estafado cuando después volvía a salir con 10 paginas inéditas. Norma Rules.

Pese a ello, gracias a estas nuevas ediciones descubrí que no era un "verdadero Fan" de Mignola, pues como me dijo un aficionado en aquella época, él si tenía todos los tebeos de Mignola. Si yo hasta había tenido el valor de no comprar un tebeo de Batman con guiones del maestro! Pues eso, que el tío me quitó los galones y allí me quede sintiéndome un triste soldado raso.

Siguieron pasando los años y Hellboy fue perdiendo pasajeros. La gente abandonaba el barco con frases como "es demasiado repetitivo" o "La historia no avanza". Y aquí estoy un millón de años después volviendo a utilizar la socorrida frase " a mi me gusta".

Dos de los últimos tomos aparecidos han sido "La oscuridad llama" y " La cacería salvaje" con Mignola a los guiones y Duncan Fegredo a los dibujos.

Mignola ha debido escuchar esas voces que se quejaban de que la historia no avanzaba y se ha metido de lleno a ello. No solo la historia avanza, es que lo hace a marchas forzadas. Lo mejor es que Mignola demuestra que todas las historias aparecidas hasta la fecha tenían su razón de ser y formaban parte de un extraño puzzle que tenia el autor en su cabeza.

En la parte gráfica Duncan Fegredo demuestra que es un puto Crack y cada pagina es un regalo. Hace desear, y atentos a la herejía, que Mignola se dedique a los guiones y no vuelva a coger los lápices. Si los deja en manos de Fegredo yo no me atreveré a quejarme.

Solo un pequeño pero antes de terminar. No sé que manía tiene Norma en estropear las portadas de la colección quitándoles el color y editándolas en un horroroso color negro.

Poco mas que añadir. Hellboy mola. Os lo puedo asegurar.



ZEKE

martes, enero 04, 2011

Fevre Dream


Es una reacción normal del ser humano. Encuentras algo que te gusta y cuando ya no tienes más, buscas incesantemente un sustituto, aún a sabiendas que la copia no va a ser, ni de lejos, el original.

Cuando se acabó la dosis de Canción de hielo y fuego, de una manera natural mi curiosidad me impulsó a buscar otras obras del amigo George. En ese momento, descubrí que anteriormente a su obra maestra había publicado otras novelas. Entre ellas figura Fevre Dream. Después de recabar algo de información, vi que la cosa iba de vampiros y barcos de vapor en el Mississipi del 1850. Tal extraña combinación, en manos del señor Martin, prometía.

Desgraciadamente, la falta de tiempo, impidió que acometiera la lectura. La novela quedó en el montón de los olvidados.

Tiempo después, vi que salía una adaptación al cómic y, por supuesto, no lo pude evitar y empecé a comprarla. Una vez leída, os puedo decir que Fevre Dream, efectivamente, es una serie de vampiros. Por ese lado, poco nuevo que añadir. Pero claro, tratándose de Martin, los convencionalismos no podían ser la moneda de cambio. Este hombre siempre sabe dotar de un cierto interés a sus relatos, aportando la suficiente originalidad y frescura para que su lectura sea, como mínimo, entretenida.

En este caso, lo que hace esta miniserie de 10 episodios merecedora de una oportunidad, es la ambigüedad de los protagonistas, tanto el capitán Abner Marsh. como el misterioso Joshua York o el pérfido Damon Julian, sin buenos ni malos y con personajes que tienen motivaciones perfectamente entendibles. Algo que el bueno de Martin ya apuntaba en esta obra y que posteriormente elevaría a la maestría en Canción.

¿Pero cómo, el capullo este no acaba el libro y se dedica a escribir cómics? Tranquis, tranquis que de eso ya se encarga su amigo Daniel Abraham, permitiendo que al bueno de George le quede tiempo para... todo menos escribir.
Como ya os decía antes, no leí la novela original, con lo cual no os puedo asegurar qué grado de fidelidad tiene con ésta, pero teniendo en cuenta que el bueno de George ejerce como supervisor, damos por hecho que es bastante fiel. En la parte gráfica, Rafa López cumple, resultando el conjunto en un más que aceptable tebeo.

Gustará a los aficionados al bueno de George, a los seguidores de las historias de vampiros, y en general, a todo aquel que busque un tebeo entretenido sin más ambiciones.

Por ahora solo disponible en inglés.

lunes, enero 03, 2011

El cielo sobre el Louvre


De nuevo tenemos en nuestro mercado una obra que solo puede ser imaginada y creada en un país como Francia. Fue allí donde el museo del Louvre se propuso colaborar con Futuropolis, una editorial de cómics, para crear una serie de álbumes con la intención final de que estos fueran exhibidos posteriormente entre las paredes de tan insigne edificio, recibiendo el cómic, la BD, el debido reconocimiento en los medios artísticos negado durante tanto tiempo.

De esta colaboración, salieron magnificas obras como Periodo Glacial de De Crécy, o Les Sous-sols du Révolu del admirado Mathieu, o la que hoy nos ocupa, El cielo sobre el Louvre de Yslaire.

En estos encargos, el museo ponía como única condición que el museo y las obras artísticas que lo conforman tuvieran un cierto protagonismo. A partir de ahí, los creadores tendrían vía libre para realizar sus trabajos.

Como no podía ser de otra manera, Yslaire aprovechó esa extraña fascinación que siente por la época romántica para enmarcar su historia en el trasfondo de la Revolución Francesa, con Robespierre como máximo representante del nuevo estatus social.

En este marco, Yslaire, con la ayuda en los guiones de Jean-Claude Carrière, recrea los momentos álgidos del periodo del Terror teniendo como hilo conductor el imposible encargo de hacer un retrato de el Ser Supremo que Robespierre realiza al pintor Jacques-Louis David.

A través de 20 capítulos, este Cielo sobre el Louvre realiza una revisión de este convulso periodo histórico mezclándose las tramas políticas con reflexiones sobre el arte.

Una obra muy interesante, en la que en absoluto se nota su carácter de obra de encargo, y en la que sus autores consiguen encajar perfectamente el obligatorio protagonismo del Louvre sin sacrificar por ello la calidad de la historia.

Por supuesto, en la parte gráfica, Yslaire lleva el dibujo a su terreno, aunque en esta ocasión, no sé si con un afán de adaptarse al periodo y al tipo de historia que nos cuenta, el acabado final no tiene la fuerza de obras como Sambre, mostrándonos un dibujo que en viñetas es el por todos conocidos, pero que en otras se queda en una especie de primerizo boceto más propio de la experimentación digital de su autor, sacrificando, en mi opinión, una de las grandes bazas del dibujo de Yslaire que no es otro que la naturalidad y la fuerza de su trazo

En todo caso, la belleza y la composición de muchas de sus planchas merecen, de sobra, la visita a este tebeo. Si a eso le añadimos que pese a lo extraño del planteamiento, su lectura consigue levantar el interés del lector y por ende despierta su afán de conocer más, creo que podemos considerar el trabajo como una obra del todo exitosa.

Como siempre, deseamos que iniciativas de este tipo también tengan lugar en España con entidades y autores patrios.