Hernández Cava vuelve a uno de sus temas fetiches como es el de nuestra Guerra Civil. Un asunto sobre el que durante mucho tiempo no le dejaron decir lo que el quería y sobre el que, cuando quisieron que escribiera con fines partidistas, no quiso hacerlo.
Años después y acompañado del preciso y detallado arte de Miguel Navia, nos llega una interpretación diferente del primer año de conflicto. Por medio de las 36 estampas que dan título a la obra, estos autores dan cuenta de la guerra que no está escrita en los libros de historias. La guerra de, es su mayor parte, anónimos personajes que la sufrieron en sus carnes.
Republicanos, agentes secretos, fuerzas golpistas, extremistas de ambos bandos, marroquíes, campesinos, terratenientes, mujeres, niños... Todos tienen un testimonio y una historia que Hernández Cava y Navia recogen en estas estampas.
Una obra necesaria, tanto desde el punto de vista social como del comiquero, honesta y nada partidista que refleja una vez más el horror y sinsentido que entraña cualquier conflicto bélico.
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