Más que de una adaptación del clásico de Orwell, Rebelión en la granja, en este caso tendríamos que hablar de un interpretación del espíritu de esa obra en la que Dorison y Delep dan cuenta de una manera tan reconocible como novedosa de la eterna lucha entre la democracia y la tiranía, el pueblo y la opresión, la razón y la injusticia.
Con un apartado visual que habla por si solo el guion de Dorison solo tiene que dejarse llevar entre las viñetas acompasado por una fascinante galería de personajes animales con comportamientos muy humanos.
Complicado era obtener un resultado original dado el punto de partida, pero estos autores lo consiguen convirtiendo El castillo de los animales en una estimulante lectura para todas las edades.
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