En los últimos meses no he podido escribir en el blog pero aprovechando un “permiso carcelario” quería hablar de uno de los grandes que nos ha dejado este año; Mike Wieringo.
Recuerdo que en su día me compré el segundo tomo de Flash de ediciones Zinco porque lo dibujaba Carlos Pacheco y recuerdo que finalmente acabé enfadado porque la mitad del tebeo no lo dibujaba él. ¡Pobre iluso! Con ese tebeo descubrí los tebeos de Waid, descubrí que el mejor Flash es Wally West (que además se convirtió en mi personaje favorito de D.C) y me enamore de los dibujos de Wieringo.
Recuerdo que, parece que fue hace mil años, cuando trabajaba con Todd DeZago en Spiderman algunos amigos me preguntaban como compraba esa serie.
¿Cómo no hacerlo? Un número dibujado por Romita Jr y otro por Wieringo hacían a este comic imprescindible para mi.
Recuerdo Tellos, uno de esos tebeos, uno de los grandes tebeos que hizo porque en él se notaba que "Ringo" disfrutaba trabajando.
Recuerdo su trabajo en los 4 Fantásticos junto a Mark Waid. Ya he hablado alguna vez aquí de lo mucho que me gustó esa etapa. Igual que hablamos de los 4F de Lee/Kirby, o hablamos de los 4F de Byrne, Waid y Wieringo marcaron una de esas etapas que dentro de algunos años se consideraran clásicos. Son tebeos que quedaran para la historia del universo Marvel.
Quedarían mil tebeos por reseñar pero estos han sido alguno de los que más me han impactado.
Este tío tenía un algo, sus dibujos trasmitían optimismo, alegría y pese a ese estilo cartoon que lo caracterizaba era capaz de sobrecogerte y mostrarte los momentos más oscuros de los personajes.
Un genio. Un puto genio. No sé con que otra palabra podría describirlo.
En fin. Se encontrara con Dios Kirby al otro lado. Seguro que éste le dice que está orgulloso.
ZEKE
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