Con Solos, la editorial Dibbuks encontró un pequeño filón con el que captar la devoción de los lectores de entre 8-15 años, sin que esta indicación etaria limite su lectura a un público más adulto.
Con Gung Ho, la editorial intenta repetir la jugada, teniendo esta ocasión como target un lector más juvenil.
Una vez más tenemos un futuro no muy lejano en el que la humanidad está sometida a una plaga blanca que amenaza con eliminarla. La civilización se concentra en las ciudades y solo unos pocos valientes salen al exterior creando colonias con las que intentar recuperar el terreno perdido. En este punto de la historia, dos hermanos llegan a la colonia 16, también conocida como Fort Apache.
Una serie que sabrá captar la atención de este público juvenil, posiblemente más atraído por la estética y tramas del manga japonés, con el que encontrarán ciertas afinidades a la hora de empezar esta obra.
Al igual que pasaba con Solos, que esta etiqueta indicativa de juvenil no lleve a error porque la lectura adulta está más que garantizada, convirtiendo este cómic en una gran inversión familiar.
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