Irremediablemente atraído por esas menciones a Calvin & Hobbes de la literatura de solapa me sumerjo en la propuesta de Brecht Evans. Y cierto es que en el libro hay una niña, Cristinita y una pantera, ¿imaginaria o real? Pero siento decir a los fans de C&H que hasta aquí se puede aguantar la comparación.
Las intenciones de Brecht Evans van por otro lado. Si en C&H se intentaba llegar a reflexiones adultas a través de los ojos de un niño, en Pantera se nos propone una visita a la parte más oscura y perturbadora del ser humano.
Una podrida fábula moderna tan inquietante como perturbadora, acompañada por un apabullante despliego gráfico por parte de Brecht Evans y sus acuarelas.
Bajo una dulce apariencia, se esconde una historia dura y sin concesiones. Gustará a lectores que disfrutaron con obras como Preciosa Oscuridad o Belleza.
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