Siguiendo en su exploración del mundo más allá de las Croquetas y Empanadillas, Ana Oncina nos propone una preciosa historia de amistad en forma de un manga josei ambientado principalmente en un campamento de verano
Una historia iniciática que con un desdoble temporal consigue alcanzar una nueva dimensión, llena de sensibilidad y que se deja leer con gran fluidez y sin poder evitar dibujar una sonrisa cómplice en nuestra cara mientras pasamos las hojas.
Muchas veces las grandes historias no necesitan elaboradas y complejas tramas argumentales y es la propia sencillez de los hechos y acciones de sus protagonistas el principal motor que hace funcionar el conjunto. Este Just Friends es un claro ejemplo.
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