Pues la verdad es que tengo que reconocer que melo he pasado muy bien con la lectura de este Maldito Karma. Una lectura tan superficial e intrascendente que gana enteros precisamente por esta razón. Solo busca un entretenimiento rápido por medio del humor y lo consigue.
Y lo consigue en gran parte gracias a los lacerantes diálogos y a la concatenación de surrealistas circunstancias en las que se ve envuelta la protagonista.
Os podéis hacer una idea si os digo que todo empieza cuando nuestra protagonista, la presentadora de televisión Kim Lange, en el apogeo de su gloria, muere aplastada por el lavabo de la estación espacial rusa Photon M3 y se reencarna en una hormiga. A partir de aquí, tiene que intentar subir su karmometro para ir consiguiendo mejores reencarnaciones que la acerquen a su vida anterior.
Ya sabéis lo que hay aquí. Ahora solo tenéis que decidir si es lo que buscáis.
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