jueves, abril 22, 2010

Kick-Ass


Una de las sensaciones de la temporada. El cómic que lleva soliviantando el ánimo de los fanboys estadounidenses desde hace una temporada y que con la inminente adaptación cinematográfica llega a España con más presencia que nunca.

El iconoclasta Mark Millar vuelve a la carga con la 22ª reinterpretación del superhéroe post Watchmen. No puede extrañar a nadie el éxito de su propuesta, porque Millar escribe desde una posición de privilegio. Siempre ha sido un fanboy escribiendo para fanboys, y estos últimos aceptan y reconocen al escritor como uno de su especie. Millar sabe tocar la fibra del aficionado. Sabe lo que le gusta, lo que no le gusta, lo que espera y lo que ansía. Kick-Ass es todo eso.

Supongo que los detractores del guionista estrella aprovecharan de nuevo este tebeo para sacar, más pronto que tarde, los estigmas que lo marcan en todas sus obras. Violencia gratuita, lenguaje soez, golpes de efecto, etc... Mientras, los fans celebrarán todas y cada una de sus ocurrencias, página tras página, viñeta tras viñeta.

Una vez leída, estoy en condiciones de afirmar que Kick-Ass no es una obra tan ligera como pudiera parecer. Está claro que la trama principal es 100% Millar, con todo lo bueno y malo que esta etiqueta conlleva y con la premisa del divertimento como santo y seña. Pero también es cierto que los pequeños matices, le dan al conjunto una segunda lectura que hace la obra interesante más allá del perímetro del reducto superheroico.

Con la colaboración de otra superestrella del dibujo, un hot-artist con el nombre de Romita Jr, la obra consigue el extra indispensable para figurar en los altares. Todos sabemos que el ritmo de trabajo de este dibujante lo lleva, sobretodo en los últimos tiempos, a ser demasiado irregular. Se podría decir que su firma ya deja de ser un motivo de garantía para comprar un tebeo. En todo caso, sin ser el gran Romita que todos añoramos, se ve que en esta empresa se ha esforzado, uniendo a su innata calidad artística un plus de trabajo y dedicación.

Kick-Ass nació con alma de clásico para el fandom. Creo que la realidad refrenda esta premisa. Pero me atrevería a decir que, película mediante, finalmente este tebeo trascenderá al grupo de aficionados estándar y posiblemente alcance el reconocimiento mediatico y pase a ser una de esas lecturas generalistas. A fin de cuentas, ¿quién se puede permitir no ser testigo directo de the next-big-thing?

2 comentarios:

Paulo Mosca dijo...

Fan-boy? Hot-artist? Next-big-thing?

Oh my god i can´t belive it!!
Melo is a modern!!!

BD! dijo...

Go fuck yourself, homie!!