No se hizo esperar. La segunda parte de la aventura de Lulú ya es una realidad. Su periplo vital lega a la estación final. En esta segunda, y definitiva, parte, todas las incógnitas propuestas por Davodeau en el inico se van cerrando con la misma tranquilidad y naturalidad con las que se fueron abriendo.
Por supuesto, no os voy a contar cual es el devenir final de nuestra protagonista, ni cómo queda su familia y amigos tras esta segunda entrega. Supongo que si habéis comprado el primer tomo es algo que querréis descubrir por vosotros mismos.
En su conjunto, Lulú: Mujer desnuda es otra marca más dentro de los aciertos comiqueros dentro de la carrera de Davodeau, un autor que sabe tocar las melodías de lo cotidiano de una manera que lo convierte en extraordinario.
Ahora sólo nos queda contar los minutos hasta su nueva propuesta.
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