Hacía tiempo que no me encontraba una historia que reflejara con tanta precisión e igual crudeza lo complejo y enfermizo de las relaciones humanas.
Meter en el mismo saco todo tipo de relaciones familiares, con temática LGTBI, unidades familiares desestructuradas, relaciones tóxicas, desequilibrio mental y al mismo tiempo salir airosa de la tarea, sabiendo aportar un atractivo e incluso una mirada optimista y diferenciadora que sepa atrapar al lector, no era tarea fácil. Lee Lai lo consigue y nos permite disfrutar de una nueva mirada al conocido cómic costumbrista de siempre.
"Querías que volviéramos a ser una familia. Pues es esto. Así que nos vemos el sábado. No tienes que ser la divertida y mágica tía Ray. Basta con que estés aquí."
Una historia tan desgarradora como preciosa.
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